Quisiera ser parte de esta noche mágica,
el fantasma sutil que se pierde en tu aroma de elfa;
quisiera ser las hebras de luz jugando
en las hebras esmeraldas de tu pelo...
En la tierra de los elfos la belleza y el poder se derramó en cada uno de sus hijos; son como los dioses del polvo a los que vanamente nos afanamos en convertirnos.